Friday, April 27, 2012

2 Ciudades de inteligencia táctica

Dos ciudades
dos inteligencias
a aprender:
San Francisco y su "Urbanismo Táctico" para una ciudad mas vivible, disfrutable, no se pierdan los Troleys (tirados a la basura por nuestra concepción de progreso) y los tranvías (idem 50 años antes).


Medellín y la inteligencia en el Transporte


Hay oportunidades, hay de donde aprender.
El tema es encontrarle la vuelta táctica.

Videos obtenidos en http://www.streetfilms.org - suscríbase.


Encendamos las Luces que acechan


7 comments:

la pinche Heidi said...

¡Qué buena entrada!
Aparte del transporte, me encantó lo de los parques acuáticos de medellín (vancouver está lleno de parques así).

*** said...

Gracias Pinche H.

Sí, parece que esta muy bien lo que están haciendo en Medellin.
Un dia voy a ir a Vancouver.

astllr said...

no es envidia exactamente, porque se lo tienen merecido, pero pienso en todo lo que acá no se hace, es decir NADA, y me entristece enormemente.

Es increíble, o no debería serlo, que el gobierno local crea en su gente y comprenda que merece cosas, pobres incluidos.

Entonces van y conectan las partes más complicadas con teleféricos y escaleras mecánicas y en el medio de la favela una superbiblioteca de super diseño y descuento que funcionando perfectamente. Como para que la gente no esté contenta.

Ve la cara de tranquilidad, de alegría de los jerarcas y los compara con los quemados de acá y se quiere morir.

y acá tratan el problema de las cárceles como si no fuera un problema urbano. Como si fuera un problema de la derecha o de la izquierda no se sabe de qué ni de quién, pero lo importante es buscar un enemigo para justificar nuestro fracaso.

No nos dan los huevos, las bolas ni la cabeza. Somos patéticos.

z said...

El tema de los presos lo han abordado tanto la izquierda como la derecha.

La izquierda lo resolvió inventando la guillotina. La derecha abusando del fusilamiento.

Así que si la solución pasa por diestra o siniestra, estamos fritos. Un enfoque humanista sería alentador. Pero lamentablemente, las colecciones de grupos políticos y el humanismo, intersectan en forma disjunta.

*** said...

Ast, yo creo que se da algo de eso que habla Jacobs: el abandono de la ciencia o del pensamiento científico. Que trata de vincular con rigor, causas y efectos; de identificar los problemas y las soluciones lógicas, probables que los saneen.
Hay una cosa de decir vamos para allá y vamos todos para allá, luego cambia la mano y vamos todos para el otro lado. Hay un tema que tiene que ver con la lucidez. Y también con las ganas.
Es patético sí, que no tengamos generada una masa crítica propia, para alimentar un debate que concluya en hacer cosas razonables para la ciudad. Yo creo que es un problema de lucidez de falta de pensamiento crítico.

De los presos, la mayoría muchachos jóvenes, un espanto. El tema me anonada, me supera. Sólo sé que el estado con el encierro, no puede hacer lo que la familia, en cuanto a formación en valores, en las formas de generar vínculos sanos y fuertes. A la larga el tema va por el lado de fortalecer las familias. Ahora, esta situación de miles de jóvenes presos que no parece tener fin, es realmente algo que no puedo abordar, me excede.

la pinche Heidi said...

En Colombia, durante algunos años, para licenciarse de médico había que hacer el “año rural obligatorio” (prestar servicio durante el último año de carrera en una comunidad rural o suburbana). Creo, pero no estoy segura, que otras carreras emularon esa iniciativa (el promotor fue Héctor Abad Gómez, un monstruo al que asesinaron de un tiro). Juraría que la amiga a la que fui a visitar a medellín me habló de que algunos de sus compañeros de arquitectura trabajaron en proyectos de saneamiento, pero capaz que me engaña la memoria. Ahora ya no lo hacen. Lo sacaron, entre otras cosas, esgrimiendo los peligros a los que se enfrentaban los jóvenes estudiantes. Una verdadera pena. Quizás muchos de los técnicos que ahora ocupan cargos de planificación sean gente que se formó cuando ese programa estaba vigente, o al menos, gente que se formó en ese espíritu del universitario comprometido, con vocación de servicio y conciencia de que su comunidad es toda su comunidad, que no hay divisoria que los separe a "ellos" de "nosotros".

astllr said...

sí, no quiero llegar a pensar que tiene que pasar algo malo para que la gente haga cosas buenas. pero es cierto que los tipos, de algun forma, aprendieron a sacar lo mejor de sí mismos, y tengo la sensación de que nosotros vivimos el caso contrario.