los
escalonados y los sorpresivos Bienvenida
la luz cenital
Bienvenido
el exceso de velocidad
Bienvenidas
las almas errantes del 137
Bienvenidas
a los siniestros Bienvenidos haitianos a la tierra prometida Bienvenidos a los parques abandonados Bienvenidos al fraude Bienvenidos a la falsa modestia
Bienvenidos
a la humedad de cimiento
Bienvenidos
a las graseras
Bienvenidos
a las bolsas de supermercado
Bienvenidos
a los envases que abren mal
Bienvenidos
los pobres de espíritu
Bienvenidos
los que no tienen nada que decir
Bienvenidos
los que reclaman por la espalda
Bienvenidos
los que escupen en la calle
Bienvenidos
los que escupen contra el árbol
Bienvenida
la tortuga con salame con bandeja y nailon
Bienvenidos
usureros que se llaman Cash
Bienvenidos
a la usura en 18
Bienvenidos
a tarjeta Abitab
Bienvenidos
a Groupon
Bienvenido el sushi de Groupon
Bienvenidos
a la gripe sin fiebre
Bienvenidos
al taxi con mampara
Bienvenidos
a la radio en el bondi Bienvenidos al fracaso
Bienvenidos a las casas vacías
Bienvenidos
a las puertas vencidas
Bienvenidos
al queso dambo
Bienvenidos
al falso pan
Bienvenidos
a los productos vencidos Bienvenidos a la presión alta (la baja) Bienvenidos a los triglicéridos (altos) Bienvenidos al pan con grasa Bienvenidos a los manicomios
Textos leídos sin
amplificación dialogan con sonidos emitidos por parlantes y se adaptan al
entorno acústico del lugar. Es un trío sonoro conformado por la voz del lector,
los parlantes y el recinto que responde con su acústica. En esta
convivencia, texto y sonido adquieren nuevos significados y el lugar se
transforma en un espacio sonoro poético inmersivo.
La experiencia
acusmática se liga al sitio, da otro sentido a la presencia del público. Cada
representación depende de una arquitectura, de una acústica y de una conexión
libre entre texto y sonido, los que huyen de todo estereotipo al revelar
aspectos inadvertidos de lo cotidiano.
Los sonidos han
sido creados para interactuar con los textos. En algunos casos son
transformaciones de textos grabados, en otros de paisajes sonoros transformados
o bien sonidos puramente sintéticos. El resultado sonoro definitivo se va
moldeando durante la performance a la manera de una obra abierta.
LEANDRO DELGADO
(textos)
LEONARDO SECCO
(sonidos)
viernes 12 de
abril, 21 y 22hs. / DODECÁ / San
Nicolás 1306 / http://dodeca.org/
Dadas las características de este acontecimiento no se
permiten fotos
ni la entrada a la sala pasados los cinco minutos
iniciales.
Monday, March 25, 2013
No saber que trama el hambre inmenso como la noche, tan absurdo e insaciable CORAZONES ROTOS el asador será devorado convenientemente por la Ley de la Vorágine cirugía plástica a plazo fijo marketing brilloso baba pobre lleve todo lo que pueda su Esfinge piel, espléndida y sonrisas. Plegaria por pasar de la cantidad a la calidad de la calidad a la caridad a la paz y al sol la caricia del alma. Aplaca la Vorágine de asir las fauces a la Luna aullando incandescentes martirios.
Se veía venir. El parte médico dijo que fue de causas naturales, que los órganos habían dejado de funcionar, para no decir, en realidad, que vivió en un solo pedo desde 2009. Tenía 39 años y una obra descomunal.
Les dejo un par de traducciones libres de mi finado blog La canción es la misma y el link a un cuento inspirado por Division St. Girl, una de las canciones más bellas que nos ha tocado escuchar.
La sangre en el pavimento, un accidente de tránsito o de trabajo, una familia, unos niños, unos sueños. Y los neumáticos que borran las huellas de la gracia y la desgracia. Aplastan la carne y cierta posibilidad de Dios en la vía pública. El vacío veloz de las luces nocturnas, en la Avenida. Apuntala el retraído aire ciudadano, imbuido de recuerdos o dichas en frascos, en el freezer en películas viejas de cable, en fotografías. Fantasma afanoso y ágil tejiendo el porvenir error de prospectiva la palabra prometida, no dicha esclava de la imaginación nocturna de la brasa del cigarrillo o un beso que abandonó al peatón en el supermercado en la tarjeta de crédito en una noche de shopping sin iva el día del Cordón de la vereda.
La gran dictadura de nuestros tiempos, Burocracia,
reinará hasta el 2237, así como los estados policiales (en dos niveles, una
policía del mundo como Estados Unidos y el dominio violento sobre una
ciudadanía sin armas).
La Burocracia (llamémosla “B”) es
la práctica de generar reglas inviolables, rígidas e infinitas forzando la
infinita variedad de la inteligencia, la experiencia y la circunstancia de los
hombres en un laberinto incomprensible, así como se fuerza a la carne en una
máquina de hacer chorizos. A veces B tiene buenas intenciones, es benevolente,
en un intento de ordenar la sociedad para que podamos vivir de acuerdo con
reglas estables y predecibles que trata a todos por igual. Pero,
lamentablemente, B es también el instrumento de los control freaks.
El funcionario público o el
subgerente de banco, a quienes, de pronto, no les gusta alguien, pueden muy
fácilmente construir altas paredes contra ese individuo. Siempre les digo a mis
clientes que los bancos (et alter) son siempre algo personal, que te da la
mejor posibilidad de triunfar, por ejemplo, a través del encanto. Noten aquí la
pista de la propia vulnerabilidad de B.
La discriminación de B siempre
tiene lugar a nivel macro. B está amenazada por, y generalmente intenta
destruir, lo nuevo, lo inusual y, principalmente, el gran enemigo: el genio.
(“Genio” proviene de una raíz romana que significa “semilla”). En las
escuelas primarias entre los setenta del siglo XX y los diez del XXI, el genio
natural de los niños ha venido siendo uniformemente suprimido por los maestros,
quienes favorecieron a las niñas por dos razones simples: 1) son más fáciles de
controlar; 2) la mayoría de los educadores eran mujeres y reflejaron la
rebelión feminista que surgió después de los sesenta. (No quiere decir que
hubiera sido mejor bajo el dominio masculino —en los sesenta fui amenazado con
expulsión por haber corregido a mi maestro de gramática. Tampoco fui rebelde ni
valiente, me pasaba las tardes llorando en la sala de espera del Director).
Así como el patriotismo es el
último refugio de los mentirosos, así la enseñanza académica es la máscara de
los burócratas. Aquellos educadores elevaron B a una filosofía, a una extraña
capacidad contra la cual el padre promedio no era de ninguna ayuda. Estas
falsas concepciones llevaron a grandes mentiras, como esta, reciente y bastante
frecuente: “las niñas aprenden mejor que los niños”. Estas mentiras destruyen
lentamente a la sociedad. Aun peor, cultivan la pasividad, como aquella que
Bush desplegó cuando Katrina devastó Nueva Orleans.
B es necesaria para el progreso
de la humanidad, pero puede ser cruel, inflexible e insensible. Debe haber una
“Segunda Ley” de B, como hay para los robots, y esta ley debería decir: “Las
excepciones son valiosas”. O algo así. Es importante establecer esta ley de
aquí a 2025, porque tanto B como la la confección de “políticas pesadas” serán
poderosas en esta fase y muy capaces de establecer estructuras cada vez más
fuertes.