Sunday, November 6, 2011


Cuando nos fuimos a casa del tío W ya sabía que en aquella vacación iba a pasar una vida entera adentro de otra, toda llena de soles y de lunas y de mar y de cerros.

La historia oficial: mi viejo tenía problemas políticos: pero no. No fue víctima de nada, no tuvo persecuciones, ni un interrogatorio, ni siquiera fue víctima de él mismo.
Presentó alguna obra de teatro “comprometida”, era algo de Brecht, pero hasta hoy dice que no se acuerda de qué obra era.

No puede ser que no te acuerdes, viejo, tenés alzheimer entonces.
No no. En esa obra me quedé dormido en plena actuación, lo mío es dirigir.
Si nunca pudiste dirigir ni tu vida
No tienes ni idea.
Y no

Era incapaz de asistir a ningún tipo de actividad militante, grande o chica, porque todo lo que estaba fuera del mundo del teatro le chupaba un huevo.
En este “fuera del mundo” estábamos mi vieja y yo. No es que estuviéramos “afuera”, sino que él vivía en una dimensión inaccesible, un mundo de ficciones con las que hablaba mucho más que con nosotros. Él no dice: “esto lo dice lady Macbeth", sino "me lo dijo lady Macbeth bajando la escalera cuando iba a matar al primo”. Y ahí empieza a hablar sobre la necesidad del enemigo y cosas así.
Siempre tenía un arma, en el ropero, una pistola chica y chata, como de james bond, de cachas blancas, y tres balas, todo en una caja de lata de películas con un piso de algodón.
Y sigue igual, leyendo el polvo de los libros y escuchando el Sodre con la misma indiferencia hacia todos y hacia todo.

Hará diez años, mi vieja reconoció esta obviedad en una conversación, en la cocina de su casa, en Barcelona. Estaba recostada contra las baldosas naranjas, con la bata, con el café y el pucho.
Tampoco era un descubrimiento para ella, es decir, que sí, que el viejo estaba muy mal de la cabeza, desde siempre, pero era algo de lo que nunca se habló, era como un dato, como el clima.
Esa noche le pregunté:

¿Cómo te casaste con un tipo así?
Y yo qué sé, Lelé. No sé por qué la gente se casa. Papeles.
¿Cómo papeles?
Sí, papeles, firmas.  No sé, vas, firmás. No sé por qué la gente se casa.
No digo la gente, yo digo “ustedes”
Ah, yo qué sé, no me acuerdo.

Entonces ese verano nos fuimos a la casa del tío W, porque a mi vieja se le habría colmado el vaso, porque apareció una actriz pendeja que le tiró los galgos.
Y el tipo ni se molestó en ir a buscarla, ni a la mina ni a mi vieja, ni en evitar ninguna situación ni en dar ninguna explicación a nadie. Porque mi padre es un tipo tocado por la suerte, sólo que esa suerte no se la transmitió a nadie, quién sabe.
Y un día la vieja se cansó. Agarró unas cosas suyas y unas cosas mías y nos fuimos a la casa de la playa del tío W.



14 comments:

*** said...

que padre!!!
imposible.
muy pero muy buena la fotografía, alucinante.

Y el tipo este canta muy pero muy bien.

Salud!

*** said...

que lugar es, si se puede saber
esta muy buena la foto

fragson said...

bellísima foto

la pinche Heidi said...

Con permiso, impronunciables.
Tengo la sensación de que este relato ya me gustó antes.
Se lo comenté a Borges, mi amigo el que escribe, y dice que él tuvo el mismo déjà vu.

fer said...

Qué buen cuento.
¡Salud!
fer

astllr said...

hola pinche, gracias, sí, a veces me repito y no me acuerdo, es la edad: soy más viejo que borges, pero mortal.

somos impronunciables, pero jntkdvr es inescribible, yo a lo mejor un poco menos, con un poco de esfuezo...

la foto es de una casa a mitad de una cuadra en la perdida ciudad de catamarca.

el señor que canta, y el tema en particular, tiene mucho de spinetta. la voz no, es única, cuatro octavas de registro.

una tarde, en un momento de lucidez, en un segundo, en una décima quizá, se metió en un lago y desapareció.

astllr said...

fer, gracias, es el inicio de una novela

jnt k dvr said...

que bien pinta esta novela ast.
arriba!!!

¿vio que uso un gliptodonte de avatar? Estoy por empezar a usar el roedor fósil de mayor tamaño que habitó la tierra: la Josephoartigasia monesi. Believe it or not

fragson said...

qué tamaño tenía ese roedor?

del cliptodonte me enteré que usaban su caparazón como guarida!

fragson said...

...digo, los humanos de entonces

jntkdvr said...

Fragson, el roedor josephoartigasia tenía 1,5 metros de altura y alrededor de 3 de largo.
Podría ser la rata mas grande que habitó la tierra, sin embargo era hervíboro como los capinchos, aunque no es de la misma familia.
Que lindo homenaje a Don José, que fenómeno.

Los planes de vivienda eran menos gravosos en la época del gliptodonte. Me imagino las ciudades del plata animadas por la construcción con caparazones de entonces. También se construían tiendas con el cuero del Josephartigasia. Nunca le faltó ingenio al Rio Platense y Patagónico (los bichos venían de allá)

Zeta said...

junta, hoy me encontré a un tipo igualito a usted, igualito igualito, sacando fotos frente a donde los gobernantes hacen leyes, pero apuntando a para el otro lado; a una pared.
Era tan igualito igualito a usted, que me dio miedo y salí, no corriendo, pero caminando ligero, hacia agraciada.

jnt k dvr said...

Z

confieso

que era yo mismo

tratando de encontrar algo

que la pena valga

jnt k dvr said...

No debería temer nada de mí.

Soy mas bueno que Lassie atada.